martes, 13 de noviembre de 2007

Al Estilo Mathey

Lo que le falta por hacer

Gustavo Cadena Mathey

En la muy amena y aleccionadora entrevista que le hizo el Director de Diario de Xalapa Omar Zúñiga Adán al gobernador Fidel Herrera Beltrán, el mandatario ofrece trabajar al doble y destaca que la unidad de los veracruzanos es la obra del sexenio.
Y efectivamente, cercano a la gente, comunicador nato, amigo de los periodistas, a tres años de haber asumido el poder ejecutivo, “sin delirios presidenciales” ni mareos de omnipotencia, el gobernador se mantiene firme en la simpatía general de su pueblo tanto por lo que dice pero más que nada, por lo que hace.
Los resultados de las recientes elecciones estatales en las que su partido se impuso en forma contundente a la incipiente aplanadora azul, reflejan el sentir de un amplio sector de los veracruzanos que expresó en las urnas su respaldo hacia el mandatario y también, hay que reconocerlo, evidenciaron otro gran número de ciudadanos que, al menos en las urnas todavía no comulgan con sus ideas o tienen demasiados compromisos con quienes les dieron chamba en los muchísimos ayuntamientos que gobernaba Acción Nacional.
Pero también se puede hablar de otros veracruzanos que no votan pero que sí ven con buenos ojos el trabajo que está realizando en Veracruz el titular del Ejecutivo.
Pero en general lo que se ve y se oye no se juzga: la mejor evidencia de la simpatía que se gana a diario el Tío Fide se refleja todos los días a través de los medios de comunicación que recogen y difunden innumerables manifestaciones de apoyo y pocas o casi nada de inconformidades contra su gobierno.
En la entrevista con Zúñiga Adán el mismo gobernador se muestra admirado de todo lo que se ha hecho y de dónde han salido los recursos para hacerlo, tanta obra pública y social que ni sus más aguerridos contrarios la pueden negar y que últimamente no sólo se ha hecho en nuestra entidad sino que se ha extendido a otras entidades como Oaxaca, Tabasco y Chiapas a las que se han destinado recursos del gobierno y de la sociedad bajo el impulso del cuenqueño.
Todo lo conseguido en los años anteriores lo llevó a cabo prácticamente sin el apoyo del congreso.
Para esta segunda ronda, convencidos de que se pueden hacer cosas mejores, los veracruzanos le dieron el control político del Congreso para que en un ambiente de coordinación y respeto entre los poderes, juntos terminen una obra sin precedente e histórica.
Lo que falta es muy complejo; es una obra descomunal y gigantesca; mejorar las condiciones de vida de los habitantes de Veracruz; más empleos, mejores caminos, mejores condiciones de salud, de educación y seguridad.
No dudemos que con todo ese gran respaldo popular que lo sigue a todas partes, Fidel hará hasta lo imposible por conseguirlo.

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