Algo me dice tu silencio
obra de relatos interioristas
La escritora Lucía Deblock presentó su primer libro, titulado Algo me dice tu silencio, en la Galería de Arte Contemporáneo de Xalapa, espacio del Instituto Veracruzano de la Cultura (IVEC) ubicado en el número 135 de la calle Xalapeños Ilustres, en el centro histórico de la capital estatal, durante una ceremonia organizada por la Subdirección de Educación e Investigación del organismo que dirige don Sergio Villasana Delfín.
La escritora Lucía Deblock presentó su primer libro, titulado Algo me dice tu silencio, en la Galería de Arte Contemporáneo de Xalapa, espacio del Instituto Veracruzano de la Cultura (IVEC) ubicado en el número 135 de la calle Xalapeños Ilustres, en el centro histórico de la capital estatal, durante una ceremonia organizada por la Subdirección de Educación e Investigación del organismo que dirige don Sergio Villasana Delfín.
Acompañada por los también escritores Jorge Moch y Rafael Antúnez, y la moderadora Georgina Trigos y Domínguez, la autora ofreció detalles sobre el contenido de este volumen literario editado por el IVEC, como parte de la colección Cuadernos del Baluarte, y que es uno de los ganadores de la edición 2006 del premio “Sergio Galindo” para la publicación de obras, que conjuntamente patrocinan el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el Gobierno del Estado a través del IVEC.
La escritora, originaria del Distrito Federal y residente en Veracruz desde hace más de un lustro, explicó que se trata de “un libro que habla sobre la mujer en sus circunstancias vitales. Me interesa mucho el silencio no como el resultado de la falta de palabras o comunicación, sino como esos pequeños momentos que sólo son posibles de ser asimilados en absoluto silencio, en la más profunda introspección.
Me interesa también la relación de la gente con las mascotas y la manera como se sustituyen los amores verdaderos por estos amores, y también me interesan bastante las obsesiones, las cuales trabajo en este libro a manera de que devengan, en varios casos, en perversión: hay varias perversiones en mi libro, y creo que les puede resultar interesante a los lectores”.
A pregunta expresa, admite que hay algo de ella misma en éste, su primer libro: “Todos los que escribimos nos plasmamos en nuestra literatura, tiene mucho que ver con la asimilación del mundo que nos rodea: somos productos de nuestra vida y cotidianidad, de nuestras lecturas y amigos; el escritor viene siendo como un tamiz por el que pasan todas estas cosas y yo, muchas veces, aunque nunca escribo nada autobiográfico, sí escribo sobre mi ámbito vital”.
Lucía Deblock empezó a leer cuando cursaba la educación secundaria y evoca una mala experiencia inicial. “Recuerdo que una de las primeras cosas que me alejaron de la literatura fue cuando, a los 12 años, me dieron a leer La metamorfosis de Kafka, y el profesor preguntaba, por ejemplo: ‘¿De qué color era el vestido de la mamá de Gregorio Samsa en el momento que le llevó el desayuno y descubrió que su hijo era una cucaracha?’.
Así no se enseña literatura: alejas a la gente de ella. Me alejé de la literatura, aunque conservé el hábito de la lectura, porque mi mamá es una gran lectora, lo cual permitió fácilmente migrar a la literatura hace unos 10 años cuando me empecé a interesar por ella”, indica Deblock, quien, a pesar de lo anterior, reconoce a Franz Kafka entre sus autores favoritos.
Por su parte, el escritor y periodista Rafael Antúnez señaló que Algo me dice tu silencio “es un primer libro muy satisfactorio para el lector, un libro de cuentos que exigen mucho de uno como lector y, a la vez, entregan mucho.
Son cuentos escritos desde una visión muy femenina, pero que no condesciende jamás a los lugares comunes del feminismo: no son cuentos de revancha sino de situaciones plenamente humanas, son mujeres y hombres que sufren, que se oprimen y que buscan liberarse, cuentos escritos con una prosa muy tersa, muy trabajada.
“Es indudable que Lucía acusa mucho la influencia tanto de Juan Vicente Melo como de Luis Arturo Ramos, lo cual es muy saludable: ella ha asimilado muy bien la enseñanza de estos grandes cuentistas y, a su vez, lo ha transformado en una voz muy particular.
Hablando sólo de Veracruz, Lucía es una de las voces más frescas, más nuevas y que está llamada, sin duda, a darnos trabajos muchísimo más importantes. Este es su libro de debut, pero no es el libro de una debutante. Es un libro muy maduro y complejo, que otorgará a los lectores grandes satisfacciones”, aseguró.
El otro presentador, el también hombre de letras Jorge Moch, definió así la primera obra literaria de Lucía Deblock: “El libro es una visión sorprendente, sobre todo por el entorno de provincia desde el que lo escribió la autora, porque estamos muy mal acostumbrados, hasta con un prejuicio, a pensar que ese entorno necesariamente tiene que reflejar lo que hace un escritor.
“Yo mismo he acusado que no hay incidencia importante en los últimos años en literatura en el puerto y Lucía es de las que nos callan la boca a los habladores.
Es un excelente libro de relatos interioristas, con una visión muy aguda de la sicología sobre todo de la mujer, y no necesariamente es un libro de reivindicación de género, pero sí hay un matiz de crueldad muy exquisito hacia los hombres, y a veces también hacia las mujeres: Lucía agarra un poquito parejo, pero siempre desde la perspectiva de una ironía que solamente creo que pueden entender las mujeres.
Es un libro muy bien escrito, con un lenguaje concienzudo, con mucho oficio, porque antes del oficio de escritora, Lucía tiene un inveterado oficio de lectora, y creo que esa disciplina tenía que traducirse algún día en el oficio de escritora”.
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