El presidente de la Comisión de Energía del Senado, Francisco Labastida Ochoa, reveló que se analiza la posibilidad de que Petróleos Mexicanos (Pemex) participe en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) para capitalizarla.
Informó que en el marco de la discusión de una posible reforma energética se estudia "algún mecanismo, que podrían ser certificados de aportación patrimonial, para que Pemex capte recursos provenientes del medio bursátil, lo cual no significa una privatización".
El legislador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) expuso en entrevista que los propietarios de dichos certificados no tendrían derecho a votar en la toma de decisiones de la paraestatal, que conservaría el control mayoritario.
Labastida Ochoa explicó que también hay consenso en todas las fracciones legislativas para otorgar autonomía de gestión a la paraestatal y dotarla de un nuevo marco jurídico, a fin de que Pemex no forme parte del presupuesto.
Además, dijo, se ha avanzado en la idea de fortalecer el control que debe tener el Estado sobre esa empresa y el sector energético, así como crear el Consejo Nacional de Hidrocarburos que vigilaría su funcionamiento.
No obstante, Labastida Ochoa admitió que todavía están lejos de llegar a alguna coincidencia en temas como la exploración en aguas profundas, pues Pemex carece de recursos y tendría que asociarse con inversionistas.
En este sentido comentó que es más rápido y barato aumentar la producción de los pozos vigentes, como el de Cantarell, ya que toma de ocho a 10 años extraer petróleo de aguas profundas.
El ex candidato presidencial detalló que otra opción es reabrir y explotar viejos yacimientos que están abandonados y a los que "sólo se les extrajo 10 por ciento del petróleo y dejaron 90 por ciento en el subsuelo".
Mencionó que tampoco hay consensos sobre los denominados "contratos de riesgo", pues la Constitución prohíbe la participación del sector privado, nacional o extranjero, en la explotación y producción petrolera.
El legislador priista indicó que urge llegar a una reforma energética, pues la producción de hidrocarburos está en franco deterioro y se importa gasolina por 35 mil millones de dólares anuales.
Indicó que existe el consenso de que Pemex debe llegar a acuerdos con empresas extranjeras estatales, como Petrobras, para explotar nuevos yacimientos y de esa forma combatir el "efecto popote", que se refiere a que empresas de otros países exploten yacimientos en aguas o fronteras mexicanas.
Francisco Labastida aseguró que en la discusión de una posible reforma energética se determinó evitar que empresas estadounidenses incurran en esa práctica.
Agregó que sólo en este caso y sin realizar ninguna reforma constitucional Pemex puede llegar a acuerdos con empresas extranjeras con presencia del Estado, como Petrobras de Brasil.
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