viernes, 16 de noviembre de 2007

Afirma experta de la OCDE

Deben universidades apostar a los sistemas innovadores

El desarrollo sostenible implica tres líneas fundamentales de articulación: económica, ambiental y social

Debe buscarse una mayor vinculación entre las empresas y las instituciones de educación superior

David Sandoval

Ante los retos de la globalización debe pensarse de manera global pero actuar localmente, es así que las universidades deben invertir en los sistemas de innovación regional, considerando tanto al capital humano como al tecnológico; en este sentido, se debe buscar una mayor vinculación con las empresas en ámbitos específicos como la nanotecnología y la biotecnología, advirtió Jaana Puukka, investigadora de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), al participar en el II Simposio Veracruzano de Otoño que organiza la Universidad Veracruzana (UV).

Con la ponencia “El desarrollo sostenible, ¿nueva visión o nueva misión de las universidades?” Jaana Puukka, quien es experta en el papel de las universidades dentro del desarrollo sostenible, presentó las condiciones que enfrentan las instituciones de educación superior a nivel mundial.

Actualmente se registra un crecimiento a nivel mundial en el número de personas que cursan estudios de educación superior, explicó, esto tiene relación con dos fenómenos: la globalización, que demanda capacidades nuevas para obtener empleos, y el crecimiento poblacional, que demanda acceso a la educación.

Es así que las universidades enfrentan un ambiente complejo y desafiante que incluye un crecimiento del poder corporativo-empresarial, crisis ambientales y el incremento con la participación de la sociedad civil en la toma de decisiones; por lo tanto, los gobiernos nacionales deben aportar mayores recursos para la educación, englobando una calidad educativa que garantice concordancia con las tendencias mundiales, detalló la investigadora.

Las políticas que se implementen tanto en los gobiernos como en las universidades deben contemplar tres líneas fundamentales: económica, social y ambiental; dentro de la línea económica se debe buscar la contratación de egresados aunado a la generación de licenciaturas eficientes y que consideren las necesidades locales y mundiales, precisó la investigadora.

En el ámbito ambiental deberá trabajarse con las comunidades para la protección de los recursos naturales y generar egresados conscientemente ambientales. La investigación y la enseñanza en materia ambiental son fundamentales para apuntalar el desarrollo sostenible, destacó Jaana Puukka.

Buscando el desarrollo social se deben implementar estrategias que fomenten el bienestar individual y social, la enseñanza y difusión de conocimientos locales y, el aspecto más importante, generar una conciencia de responsabilidad dentro de la población, advirtió la experta.

Para que una universidad pueda articular en sus programas educativos dicha estrategia, debe contar con una autonomía para ejercer sus recursos y diseñar sus políticas educativas, además de reconocimiento y el interés de los grupos empresariales en invertir dentro de la institución, apuntó.

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